Hay vinos que no esperas que te sorprendan y, acaban emocionándote.
Hay personas que, sin querer hacer grandes vinos, consiguen transmitir su pasión, su esfuerzo y la cultura de un territorio en una botella de vino. A eso, normalmente, se le llama terroir; pero, si quienes lo consiguen de una manera humilde y sin pretensiones, no son reconocidos enólogos, ni tienen bodegas diseñadas por aclamados arquitectos, ni sus etiquetas aparecen en las revistas más prestigiosas… difícilmente sus vinos lleguen a ser un referente, pero lo bueno es, que tampoco lo pretenden. Read More